ADVC Y OTRAS MODALIDADES DE CONSERVACIÓN

En México, la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente (LGEEPA) incorpora otros instrumentos que promueven la participación directa de las comunidades en la gestión ambiental. Tal es el caso del reconocimiento de predios, sujetos a cualquier régimen de propiedad, como “Áreas Destinadas Voluntariamente a la Conservación” (ADVC). Esta categoría de protección ha sumado poco más de medio millón de hectáreas a las áreas naturales protegidas en México.

Este instrumento involucra directamente a la sociedad en la conservación de la biodiversidad. Al ser de naturaleza voluntaria, los propietarios asumen el compromiso de proteger y manejar sus predios de manera sustentable, asumiendo la responsabilidad de protegerlos sin que ello implique la imposición de modalidades o restricciones a su propiedad.

Las ADVC se consideran sitios productivos dedicados a una función de interés público, ya que:

• Proveen servicios ambientales.
• Contienen y salvaguardan diversas especies de flora y fauna.
• Contribuyen en la representatividad y conectividad ecológica entre las ANP decretadas existentes.
• Promueven la cultura de la conservación y el desarrollo sustentable, entre particulares, pueblos indígenas y asociaciones civiles.

La CONANP y el Proyecto protección y uso sostenible de la Selva Maya apoyaron la adopción de esta categoría de protección, propiciando la creación de modelos sustentables de gestión territorial y uso del suelo, como estrategia que contribuye a la conservación de la Reserva de la Biosfera Calakmul.

Los acuerdos de conservación de los recursos naturales establecidos en 10 ejidos del municipio de Calakmul, México, fueron incorporados en sus planes de manejo comunitario. Basada en esto, la CONANP otorgó la certificación como ADVC, elevando el estatus de protección al mismo nivel que cualquier otra área protegida federal. El distintivo de estas ADVC es que fueron promovidas por los propios dueños de la tierra, pueblos indígenas, organizaciones sociales o ejidos.

Actualmente el Proyecto fomento del monitoreo de biodiversidad y cambio climático en la Selva Maya orienta el proceso de monitoreo de la biodiversidad con énfasis en los esfuerzos de control y vigilancia que realizan las ADVC. Se espera que los resultados obtenidos ayuden a diseñar estrategias que promuevan la conservación de la biodiversidad y su aprovechamiento sostenible.

En este mapa se encuentran las 10 ADVC de Calakmul, México.

Con la finalidad, entre otras, de preservar los ambientes naturales representativos del país, asegurar el aprovechamiento sustentable de los recursos naturales, reducir la vulnerabilidad de la sociedad y de los ecosistemas frente a los efectos del cambio climático, mantener e incrementar los sumideros de carbono y garantizar la conectividad ecológica entre ecosistemas terrestres, además de las áreas protegidas, la SEMARNAT considera corredores biológicos y Otras Modalidades de Conservación.

Un ejemplo de esas otras modalidades son los denominados tolches, es decir, bandas de vegetación arbórea de 20 metros de ancho, que están a lo largo de ríos y caminos, y el fundo legal; o bien, franjas de 2 km de ancho que se encuentran alrededor de las poblaciones mayas. Estos espacios vegetales han sido formados y mantenidos por los habitantes mayas de la región para la protección de lagunas, apiarios, milpas, ríos y cenotes. También proporcionar sombra y espacios de descanso a los campesinos en tránsito, además de que constituyen una fuente cercana para el aprovisionamiento de leña, fruta, materiales de construcción e inclusive de madera en rollo.